Mi amigo Frank me contó que el río al que íbamos tiene un secreto. Allí debimos haber estado hoy con mis hijos, en los sueños de mi siesta. Uno, de a poquito, sin darse cuenta, se va rejuveneciendo con esa agüita marroncita.
Estaba Malena subida a un botecito, mientras Emiliano jubaba en mis hombros y yo, arrodillado en el agua, vigilaba sus risas. Y de repente, el globo que inflaba mi chiquita, explotó y ella cayó al agua del susto... Y mientras caminaba hacia mí, se iba haciendo más y más chiquita.
En el cielo rojizo se desplomaba la tarde y tras la sierra, apresurada, aparecía la luna. Dice Frank que hay que ser cauteloso, porque a más de un abusivo lo pescó la noche y se perdió en un orgasmo. ¡Tampoco es cuestión de andar desnaciendo a cada rato! me advirtió.
*Sueño siestero de esta primavera recién nacida.
*Es una recreación en el sueño de aquella idea de Quino, titulada "La vida debería ser al revés" donde uno primero muere y se va haciendo más y más jóven, disfrutando. Luego se va de la vida en un orgasmo (el de sus padres, naciéndolo)...
*Frank Joe Salamone es mi único amigo yankee, que hace años (unos treinta) que no veo. Debe andar cumpliendo con su Dios e incumpliéndo con él. Dónde estés,un abrazo.
*Gracias Corel Photopaint porque me permitís poner las cosas y las personas donde quiero, como en esta oportunidad. Ni mis hijos estaban en el´río, ni las fotos son contemporáneas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario